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Las huellas de la Ingeniería: legado y construcción de futuro

La ingeniería como disciplina se remonta en sus inicios a la Edad Media donde era un oficio asociado a inventores de cosas. Etimológicamente, Ingeniero/a proviene del latín “ingenium” (ingenio) y del sufijo “ero/era” (oficio, profesión). Si recorremos la historia vemos el aporte de personas que han cambiado el curso de la historia, tales como Leonardo da Vinci con su diseño de helicóptero, paracaídas, planeador y de grúas giratorias; James Watt con su máquina a vapor y la primera cámara de condensación separada, que permitió aumentar significativamente la eficiencia energética, iniciando la Revolución Industrial; Ada Lovelace que perfeccionó la primera máquina analítica capaz de ejecutar programas creando las tarjetas perforadas, dando paso a la primera generación de computadores digitales; Hedy Lamarr inventora del sistema de comunicaciones a control remoto “técnica de transmisión en el espectro ensanchado”, sobre las que actualmente se basan WIFI, GPS o Bluetooth; y nuestra Justicia Espada, la primera mujer Ingeniera en Chile y Sudamérica, titulada en la Universidad de Chile, calculista de puentes en la Empresa de Ferrocarriles del Estado, quien diseñó el puente de la vía férrea sobre el río Malleco; por mencionar algunos ejemplos destacados en las diversas disciplinas.

Para la academia e investigación aplicada, desde las ciencias hasta el desarrollo de la tecnología, hoy se requiere formar, habilitar y disponer de ingenieras e ingenieros de distintas áreas disciplinarias, capaces de ofrecer al país (sector público, privados, academia, comunidades) opciones y soluciones concretas que enfrenten los retos y desafíos de crecimiento, desarrollo y bienestar que nos impone el cambio climático; la crisis alimentaria; las mega sequías que impactan gran parte de nuestro territorio; la conectividad de zonas aisladas; el cambio demográfico al aumentar la esperanza de vida de la población por sobre los 90 años, y el consumo de energías para todos los usos diarios; entre muchas otras pruebas.

La nueva generación de Ingenieras e ingenieros asume el reto de integrarse con las numerosas especialidades para alcanzar resultados integrales, sistémicos, con soluciones no tradicionales e ingeniosas, que impactarán a escala mundial. Es muy emocionante y una oportunidad única de trascendencia para las generaciones mayores, el poder bosquejar, acompañar y apoyar cómo los más jóvenes escribirán su legado en la historia… que es, ni más ni menos, nuestro propio futuro.

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